Jabino (enebro)

Nombre: Jabino (Juniperus Thurifera L. = Sabina thurifera Ant. = Juniperus hispanica Lamk.)
Familia: Crupesaceas. Subfamilia - Juniperoideas
Nombre común: Jabino (en la comarca),sabina albar, tarabina o trabina.
El género Juniperus incluye cinco especies de arbustos y árboles silvestres en nuestro territorio, dos enebros, el enebro común (J. communis) y el enebro de la miera (J. oxycedrus) y tres sabinas, la sabina negral (J. phoenicea), la sabina albar (J. thurifera) y la sabina rastrera (J. sabina).
La temperatura es el principal factor discriminante. Así, J. oxycedrus y J. phoenicea se encuentran desde el litoral hasta el límite con el piso supramediterráneo, J. thurifera vive sobre todo en el piso supramediterráneo, J. communis en los pisos supra y oromediterráneo, mientras que J. sabina vive en el piso oromediterráneo. En general son especies resistentes a la aridez, aunque el enebro común parece estar limitado por precipitaciones estivales inferiores a 80-100 l/m2. No rebrotan bien tras tala o incendio, aunque J. oxycedrus, rebrota bastante bien de cepa y J. phoenicea que es capaz de rebrotar en estado juvenil. J. thurifera es una especie dióica, es decir que tiene individuos macho e individuos hembra independientes. Las flores de los machos únicamente producen polen, que es dispersado por el viento, mientras que las flores de los árboles hembra son fertilizadas por el polen masculino y forma unos "frutos" llamados gayubas.


 hojas  estróbilos (gayubas jóvenes)  corteza  
Dichos frutos no alcanzan el grado de madurez hasta el segundo otoño tras la polinización (20 meses), cuando toman un color oscuro característico. En este momento es cuando distintas especies de tordos los comen y dispersan sus semillas.


 Madera de jabino  La madera de este árbol es imputrescible e inatacable por los insectos debido a su resina. Se utiliza para hacer armarios, esculturas y en ebanistería.

Los sabinares de sabina albar son considerados como relictos testimoniales de los bosques esteparios pre-glaciales que tuvieron su esplendor en períodos más áridos que los actuales. Esta herencia esteparia confiere a la sabina albar una gran capacidad de sobrevivir a las bajas temperaturas invernales y a las sequías estivales, por lo que actualmente las principales masas arbóreas las podemos encontrar en zonas con un duro clima continental.