Deja de pasar desapercibido
Hoy en día podemos ver un sinfín de anuncios, sitios webs, blogs, banners, e-mails, etc.
Pero...piénsalo, ¿cuántos de estos consiguen que los recuerdes?, ¿cuántos ocupan un espacio en tu mente? ¿cuántos te impactan?
Cuántos, cuántos…seguramente no sean ni una cuarta parte de todos los que has llegado a ver a lo largo del día.
Y es que el problema que tienen la mayoría es que no saben cómo destacar entre la multitud.
Como negocio debes competir contra todo eso.
Porque tu cliente solo tiene dos ojos, dos orejas, un cerebro y unas 16 horas al día. Si tu no haces algo para que te recuerde y se interese en ti, tal vez otro lo haga y pierdas esa oportunidad.
Sabes que tus clientes no están esperando tu próximo lanzamiento como si fuese el nuevo iPhone. Sabes que no tienen anotado en su agenda tus próximos movimientos. Solo algunas marcas tienen ese privilegio.
Sin embargo, puedes hacer muchas cosas para ganarte un lugar en la mente de tus clientes. Y no es una cuestión de tamaño, sino de tener claro cómo funciona hoy la comunicación.
Así que, si tu marca está pasando desapercibida, quédate a leer los 5 errores comunes que seguramente estés cometiendo.
1. Tu mensaje es demasiado generalista
Las medias tintas ya no sirven. La gente no les presta atención a las cosas “normales”. Solo recuerda aquellas que se salen de la media.
Por eso debes impactar con tu mensaje, debes posicionarte y buscar tu valor diferencial para comunicarlo sin miedo.
No intentes conectar con todo el mundo, porque no todo el mundo puede ser tu público objetivo, así que primero identificalo y luego conecta.
2. No juegas con las emociones
El proceso de compra es sobre todo un proceso emocional.
En la mayoría de ocasiones, las personas compramos aquello que nos hace sentir mejor. Ya sea porque los valores de la marca coinciden con los nuestros, porque el producto expresa mejor nuestra personalidad o porque nos diferencia de los demás.
No te limites a mostrar los beneficios racionales de tu producto o servicio. Muestra los aspectos emocionales de tu marca o de tu servicio para atraer y enganchar a los clientes y crear así relaciones más intensas.
3. Tus palabras no conectan
Es importante que elijas las palabras adecuadas, ya que estas siempre han sido y siempre serán la base de todo.
Debes tener en cuenta que los contactos que se producen entre marca y consumidor son fundamentalmente escritos, ya sea a través de los anuncios, de la página web, del blog, del e-mail, etc.
Por eso, es importante que conozcas las claves del copywriting:
· Elabora tus textos teniendo en cuenta que tú no eres el protagonista.
· Escribe pensando en los deseos, las inquietudes y los miedos de tus clientes.
· Habla más de beneficios que de características y consigue así enganchar a tus clientes.
· Define bien el objetivo de tu texto y utiliza llamadas a la acción para conseguir que tu cliente actúe.
· Mejora la legibilidad usando frases y párrafos cortos.
· Y, sobre todo, dale tu estilo y diferenciate de la competencia.
4. No eres útil, interesante o inspirador
Si quieres seducir a tus clientes, tu estrategia de comunicación no puede basarse solo en anuncios.
El consumidor se ha acostumbrado a recibir miles de impactos publicitarios por minuto. Con el tiempo, ha aprendido a ignorar los mensajes que simplemente están ahí para venderle algo.
En cambio, hay cosas que nunca ignorará:
· Contenido que le resuelva un problema concreto
· Contenido que le sorprenda
· Contenido que despierte su creatividad
Es importante que primero atraigas para que luego puedas vender.
5. Tu marca es inconsistente
El proceso de compra se ha vuelto muy complejo.
Tus clientes tienen acceso a una gran cantidad de información, ya que tienen a su disposición muchas opciones diferentes.
Antes de tomar una decisión, tu cliente pasa por diferentes fases.
Primero toma consciencia de que tiene un problema.
Luego se informa sobre las soluciones que puede aplicar.
Después elige unos finalistas entre las opciones que más le han gustado.
Y, por último, elige al ganador y le compra.
Por este motivo, es importante que seas coherente a nivel escrito y visual, que diseñes una experiencia consistente en todas y cada una de las fases por las que pasa el cliente.
Se impactante, reconocible y diferente a los demás, para atraerlo y conseguir que te compre a ti.
Cumpliendo estos requisitos te será más fácil crear familiaridad, credibilidad y confianza, tres factores imprescindibles para decantar la balanza a tu favor y que la venta sea tuya.
Conclusión
Ese cliente que tanto deseas nunca contratará tus servicios o comprará en tu tienda a menos que captes su atención y seas capaz de transmitir confianza.
Ponte en marcha y haz que todos te recuerden, eso es lo primero que debes hacer.
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