Será por eso Caifanes.

Por: Diana Sánchez

En la historia de la música rock en español y específicamente de México, hay un proyecto que sin duda es sello de grandes historias. Un grupo que desde el nombre, lleva consigo una carga social.

En 1987, unos jóvenes desconocidos Saúl Hernández y Diego Herrera, tenían la inquietud de crear un proyecto musical en el que su sonido fuera único. Uniéndose a ellos Sabo Romo y Juan Carlos Novelo, fue naciendo lo que se conocería como Caifanes, un nombre fuera de lo común pero con mucho significado. Influenciados por un marcado rock gótico europeo, montaron sus primeras canciones y buscaron oportunidades, cosa que no fue sencilla. A pesar de eso realizaron su primera presentación el 11 de abril de 1987 en el icónico Rockotitlán, un foro creado por los también músicos Sergio y Fernando Arau, en el que se les daba cabida a grupos alternativos que no tenían donde tocar. Después de su segunda presentación, Novelo decide abandonar el grupo, dándole cabida a Alfonso André. Es así que la agrupación cierra sus filas en aquel entonces y la cual persistiría años después. Gracias a los proyectos anteriores y alternos que tenían cada uno de los integrantes, fue formándose una legión de fanáticos propios de Caifanes, ya solo quedaba comenzar ha afianzar el proyecto con un disco, labor que no sería fácil. En 1988 se dio la explosión de grupos españoles/argentinos y nació el ya famoso «Rock en tu idioma», que no era más que el apoyo de las disqueras a agrupaciones latinas que llevaban tiempo moviéndose en lugares comunes como bares, tardeadas, etc. Es aquí que con un presupuesto reunido, Caifanes deseaba grabar un disco bajo el cobijo de algún productor español, pero solo les alcanzó para un demo de cuatro canciones: Mátenme porque me muero, Nada, Será por eso y Amanece.

Mátenme porque me muero fue el elegido para darse a conocer en radio, es así que comienzan a ganarse el gusto del público. El paso siguiente sería firmar con alguna casa disquera, lo cual fue una labor complicada debido en parte a su apariencia gótica. Pero una oportunidad más se les presentaría gracias a Ariola Records. Ésta traería a la Ciudad de México a su entonces artista Miguel Mateos. Necesitaban teloneros, así que convocaron a dos jóvenes bandas mexicanas: Neón y Caifanes. Ahí conocerían al argentino Óscar López que sería el productor de su primer LP y quien también los ayudaría a firmar con la casa disquera. Para 1988 editan su disco homónimo. También conocido como el Volumen I o el disco negro, en su primera edición en vinilo solo se incluían nueve tracks. Para su re-edición en disco compacto (1993), se incluyeron dos temas más: La negra Tomasa (extraída del EP homónimo) y La bestia humana (extraída del EP Mátenme porque me muero). Nueve de las canciones son composición de Saúl Hernández, dos más son de Diego Herrera y una del cubano Guillermo Rodríguez Fiffe.

Caifanes nos lleva por un paseo entre el rock gótico, el new age, el post punk y hasta el tropical. Cabe resaltar que La bestia humana, contó con la colaboración en guitarra de Gustavo Cerati y en Nada con el mismo Óscar López en el Chapman Stick (pariente del bajo y la guitarra, pero sin caja de resonancia). Te estoy mirando, Nunca me voy a transformar en ti, La bestia humana, podemos tomarlo como ese amor de pareja que cede en ciertas cosas pero manteniendo su individualidad. O también podría estar hablándole a las sustancias prohibidas. Amanece, nos remonta a nuestros días de adolescencia y por qué no, también de la vida adulta, en los que no sabes qué será de ella, pero que al final todo se aclara. Nada es una oda a la muerte y depresión. Al contrario encontramos La negra Tomasa un homenaje a la vida y a la mujer fuerte que fue en la realidad. Será por eso, es sin duda un tema de individualidad, de identificación, de pertenencia.

Un trabajo que tiene en la música y en las voces, coqueteos con Joy Division, Bauhaus, Siouxie and the Banshees y The Cure. En 2006, ocupa el puesto #69 de la lista de «los mejores 250 álbumes del latin alternative» de la revista estadounidense Al borde (1997), especializada en música rock en español local e internacional. Disco que es básico dentro de la historia del rock en español y de cualquier playlist del mundo.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.