el paladar de la vía que muerde con las encías sus esperanzas de acero y del farol esquinero
una moneda de luz
se cayó sobre la cruz de sus sueños paralelos sobre el renglon de la calle y escrito con luna llena el barrio contempla un nombre que sabe de alcohol y pena un nombre que sabe a tango y lleva llanto en sus venas un nombre que nadie olvida porque era un tango su vida y la llamaban Malena.