El documento describe la fuerza y utilidad del triángulo en geometría y construcción. El triángulo es el único polígono que no se deforma bajo presión, lo que lo hace ideal para estructuras que soportan gran peso como torres eléctricas, puentes y andamios. Las estructuras metálicas usan triángulos internamente para dar rigidez. La torre Eiffel también aprovecha la rigidez del triángulo para soportar su altura de 300 metros.