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Todos debemos conocer unas cuantas maneras de asustar a alguien fácilmente. Cuando crezcas, quizá seas víctima de algún tipo de broma pesada. Es bueno que conozcas algunas, así que prepárate si alguna vez tienes que tomar venganza. También es aceptable asustar a alguien en ciertas fechas como el día de los inocentes o en Halloween. Diviértete y no te dejes llevar mucho por tus hazañas.

Método 1
Método 1 de 3:

Esperar el momento correcto

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  1. Esperar en un lugar y aparecer saltando para asustar a alguien depende enteramente de lo que conoces de la persona a quien vas a asustar. Familiarízate con su horario y su rutina. Esto puede ahorrar tiempo para esperar el momento correcto para aparecerte.
    • No debes tratar de asustar a un desconocido, porque no sabes de lo que es capaz de hacerte. Si te metes con la persona incorrecta, podrías terminar lastimado.
  2. Busca un armario, de preferencia uno que muchas personas abran, y sal de él saltando. Sostén algo, como una lata de sopa, o ponte abrigos enormes.
  3. Este truco solo funciona para las puertas que se abren desde dentro. Escóndete detrás de la puerta de alguien y, cuando la cierre, sal saltando o gritando algo.
    • Para que tu broma tenga un elemento extra, di algo específico como “bu” o “espagueti”. Así podrás tener la oportunidad de preguntar: “¿Por qué te asustas por el espagueti?”.
  4. Agáchate detrás de algunos arbustos y sal saltando cuando alguien pase.
    • Ten cuidado de no cortarte con las espinas del arbusto.
  5. Esta broma es para valientes. Asegúrate de que el bote de basura tenga el tamaño suficiente para que entres fácilmente, y asegúrate de que no haya basura. Cuando alguien pase, sal saltando o empieza a gritar.
  6. Ponte debajo de la cama de tu hermano o hermana y espera a que oscurezca. Cuando apague la luz y esté acostado, susurra su nombre con una voz tenebrosa.
  7. Esta técnica es buena si uno de tus padres trabaja en casa o usa su escritorio seguido. Ponte en una esquina del escritorio y cuando alguien se siente, agarra su pierna fuertemente.
  8. Busca una tienda cerca que tenga maniquís en su vidriera. Párate al lado de los maniquís que dan a la calle. Cuando alguien pase frente a ti, salta hacia la ventana con las manos extendidas hacia él.[1]
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Método 2
Método 2 de 3:

Utilizar accesorios

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  1. Las arañas de plástico son un accesorio excelente para asustar a los hermanos o a los amigos. Se venden en casi todas las jugueterías y cuestan muy poco. Procura buscar una grande y realista.
    • Pon la araña. Usa un poco de hilo dental para pegar la araña al marco de la puerta. Haz un nudo fuerte en la parte trasera de la araña.
    • Luego, busca una manera de colgar la otra punta de hilo dental sobre el marco de la puerta. Esto hará que la araña aparezca justo al frente de la persona que esté debajo.
  2. Las muñecas son un elemento clásico para asustar. Están entre la delgada línea de ser lindas y espeluznantes. Si encuentras una muñeca que da miedo, perfecto, pero también puedes modificar una muñeca que ya tengas.[2]
    • Pinta la muñeca. Consigue un poco de pintura líquida o en aerosol blanca. Luego aplícale una capa blanca a toda la muñeca.[3]
    • Para los que piensan que lo siguiente será más efectivo, puedes pintarle los ojos de rojo o negro. La yuxtaposición de los colores puede ser terrorífica.
  3. La ubicación es crítica para que un accesorio como una muñeca o una araña pueda asustar. Este truco será mejor para quienes viven en tu casa, por ejemplo, tu hermano menor o incluso tu mamá. Justo antes de que la víctima se vaya a dormir, pon la muñeca en un lugar donde pueda verla desde la cama. Pon la araña en el vano de una puerta donde sepas que alguien pase frecuentemente.
    • Otra manera de asustar a esa persona es esperar primero a que se duerma. Luego, pon la muñeca o la araña al lado de su almohada. Si se despierta en la madrugada, oirás un grito.
  4. Si tienes acceso al celular de la víctima, podrías darle un gran susto. Elige una persona cercana en su vida, como un amigo o familiar cercano. Cambia la información de contacto con tu número telefónico.
    • Envíale un mensaje de texto desde el contacto falso. Esta parte queda abierta a tu toque de creatividad. No lo asustarás para nada si solo escribes “cerebro”. Tienes que decir algo más tirado de los pelos, por ejemplo:
      • “Hay un asesino suelto en tu barrio. Te ruego cerrar tus puertas y tus ventanas con cerrojo”.
      • “¿Sabías que si sientes un escalofrío cuando estás arropado en la cama en la noche significa que un fantasma ha pasado frente a ti?”.[4]
    • Este truco es un poco más complejo. Hay muchas probabilidades de que te salga el tiro por la culata o no funcione como quieres.
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Método 3
Método 3 de 3:

Vestirte para asustar a alguien

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  1. Las máscaras que dan miedo son buenas para asustar a alguien fácilmente. Las venden normalmente en las jugueterías y las tiendas con productos para fiestas.
  2. Aplicarte mucha base blanca hará que tengas un look cadavérico o macabro. Este truco puede usarse en conjunto con diversas técnicas de escondite y de aparecer saltando.
  3. Abre un paquete de kétchup un poco y ponlo en la palma de tu mano. Espera hasta que estés cerca de alguien a quien quieras asustar. Da un gran grito y luego date un golpe con la mano donde tienes el kétchup en algún lugar de tu cabeza, como el cuello o la frente.
  4. Las capas negras con capucha son un clásico del guardarropa de los monstros. Incluso puedes esperar a que llegue alguien, como uno de tus padres, y ponerte frente a la puerta. Luego espera pacientemente a que llegue y asegúrate de que la capucha te cubra la cara.
  5. Los payasos dan mucho miedo. Si te pones la ropa y el maquillaje correctos, ten por seguro que asustarás a alguien. Lo mejor es combinar este atuendo con el truco de esconderse y esperar.
  6. Este truco es fácil y da mucho miedo. Solo ponte sangre artificial debajo de los ojos. Aplícatela de modo que parezca que has estado llorando.[5]
    • Para conseguir un mejor efecto, agacha la cabeza, cúbrete los ojos y finge estar llorando. Espera a que alguien te pregunte si estás bien y luego levanta la cabeza.
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Consejos

  • Asegúrate de estar en el lugar necesario sin que nadie te vea.
  • Lo mejor es realizar estos pasos en la noche. Además, puedes tratar de camuflar tu ropa más espeluznante con tus alrededores.
  • Ponte un disfraz de Halloween terrorífico.
  • Quédate en silencio absoluto antes de asustar a alguien.
  • Permanece fuera de la luz y evita los sonidos (las tablas chirriantes del suelo, las escaleras, las risas, respirar fuerte, etc.).
  • Ponte zapatos cómodos y asegúrate de que no suenen.
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Advertencias

  • Ten cuidado con las sombras, la luz que sale de las puertas que puede proyectar una sombra que los demás pueden ver. Procura que la zona sea lo más oscura posible.
  • Recuerda no aplicar nuestros consejos a nadie menor de 7 años o mayor de 60. De lo contario, puedes asustar al pequeño permanentemente con pesadillas y puedes provocarles a los mayores un ataque cardíaco.
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Categorías: Chistes y bromas
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