Comienza a formarse en el mismo momento de la implantación del
embrión, en la pared uterina (aproximadamente una semana después
de la fecundación).
Se desarrolla a partir de dos componentes o tejidos
extraembrionarios:
1- Corion frondoso, anexo embrionario originado a partir del
Trofoblasto y
2- La decidua basal, endometrio materno con vasos sanguíneos
y glándulas.
Componentes que al transitar por diferentes etapas evolutivas
representarán, en la placenta madura (de término): la placa coriónica
(cara fetal) y la placa decidual (cara materna), respectivamente.
Esta estrecha relación materno-fetal permite el intercambio de:
oxígeno, sustancias nutritivas y producción de hormonas. La placenta
es un órgano endocrino.
La placenta vive aproximadamente cuarenta semanas (con más de
cuarenta semanas envejece (placenta vieja) y deja de cumplir sus
funciones nutritivas).
Cuando acaba la gestación tiene un espesor aproximado de 1,5 a 3
cm, con 15 a 20 cm de diámetro y un peso de 450 a 600 grs. (sin
contar con el cordón umbilical al cual se encuentra unida).