Una proyección cartográfica es, según la Wikipedia, «un sistema de representación gráfica que establece una relación ordenada entre los puntos de la superficie curva de la Tierra y los de una superficie plana». Es decir, una manera de trasladar la realidad esférica de nuestro planeta a una superficie plana. Hay que partir de un hecho: no es matemáticamente posible hacerlo de forma precisa: cualquier proyección cartográfica conservará, como máximo, una de las tres características principales de un mapa: los ángulos, las áreas y las distancias. O sea: hay que elegir entre las siluetas de los continentes y países, las superficies de esos mismos continentes y países o la distancia entre dos puntos del mapa, pero más de una es imposible. Todos los mapamundis que conoces, por lo tanto, están mal. Una vez establecida esa regla fundamental, un mapamundi puede venir en cualquier forma y sabor, y eso es lo que vamos a ver hoy: proyecciones cartográficas más bien raras.
(Previamente en Fronteras: La Escala del Mundo, sobre las proyecciones cartográficas típicas y por qué la Gall Peters es una mierda pinchada en un palo que debería desaparecer. También El verdadero tamaño de los países, en el que podemos comprobar qué pasa en un mapa Mercator normalico cuando trasladamos un país o una región de lugar y la superponemos a otros países en otras latitudes).
El mapa sobre estas líneas está realizado con la Proyección Werner, que data nada menos que del siglo XVI. No es la única proyección con forma de corazoncito. Tenemos también la Boone, que es anterior aunque lleve el nombre de un tipo nacido dos siglos después o la doble cordiforme (o sea, dos corazones), que también es del siglo XVI, Hay formas todavía más cuquis para un mapamundi, que vamos a ver a continuación
La mayoría de las proyecciones de uso común centran la visión en los continentes. Al fin y al cabo es donde viven las personas, y tal. Pero, ¿qué pasa si en vez de mantener la continuidad de las masas terrestres hacemos lo propio con las masas de agua? Cosas raras:
Los mapas tradicionales que usamos en Europa y América suelen estar centrados en el Meridiano de Greenwich con aspecto longitudinal. Es decir, que están orientados al eje de rotación de la Tierra. Pero como todo en la cartografía, eso es una convención, que puede ser ignorada olímpicamente, con entretenidos resultados. Pongamos por ejemplo la proyección de Mercator. Es una proyección cilíndrica centrada en el Ecuador, es decir, el Ecuador es la línea de menor distorsión, y de ahí que cuanto más al norte más deformado se vea todo. Pero, ¿y si giramos el mapa y orientamos al Ecuador? El Meridiano de referencia (el de Greenwich, por ejemplo) se convertiría en la zona de menor distorsión y cuanto más al este o al oeste de él, mayor sería el horror cartográfico. ¿Cómo se ve algo así? Malamente, que diría aquella:
Festejo el hecho que publiques seguido, después de un tiempo de tenernos olvidados, ahora nos damos un empacho de tus informes, seguí así.
Podria faltar el mapa demostrando que el sur es «arriba» y el norte es «abajo» para simplificar que no hay una ubicación determinada de un objeto en el espacio, tal vez se deslice eurocentrismo y algo mas…un abrazo.
Pensé lo mismo, aunque ellos creen que es como el logo de la ONU, con el Polo Norte en el centro…. tienen mucha imaginación, son cospinaroicos y lo peor es que suman muchos adeptos a diario.
Karji20-May-2019 / 7:46 pm
«Droja» dura esta sesión de Fronteras!!!
Al final, al pobre Mercator se le pone a caer de un guindo siempre, pero te permite no perder el rumbo
Ahora que lo dices, sí, pero bien escondidito que está ;o)
Eso sí, no todo el mundo puede decir que pone en su blog más proyecciones que Randall Munroe.
Chapó Sr. Gon!!!
Luis Capeto21-May-2019 / 10:46 am
Muy interesante entrada. Cabría preguntarse para qué sirven tantas proyecciones. Todas intentan aproximar una esfera, cosa imposible. Pero, ¿para qué? Está claro que la proyección Mercator es la ideal para la navegación, pero claramente las cartas de navegación tienen una escala más pequeña, en la cual las formas y superficies se preservan aceptablemente. Pocas razones se me ocurren para utilizar un mapamundi, salvo aplicaciones satelitales y balísticas.
Parecería que el mapamundi tiene un sentido didáctico, más que nada. Y en ese caso yo me pregunto por qué no utilizar directamente un globo terráqueo o un Mercator normalito para los atlas (salvo tal vez para los continentes).
Que divertido sería estudiar geografía con estos mapas tan curiosos! 😀
Thiara30-septiembre-2020 / 7:11 pm
1Los ángulos, Las áreas y las distancias
2
3No, no me imaginaba
4la extraña: corazón Proyección Werner
No me gusto: Proyección Octante
5Seria confuso y no tan divertido
6Pesado pero interesante
Thiara
que locura, como se puede deformar la realidad.
Espero tu entrada analizando el mapa de los terraplanistas jajajaja
¿No es el que aparece en la bandera de la ONU?
Festejo el hecho que publiques seguido, después de un tiempo de tenernos olvidados, ahora nos damos un empacho de tus informes, seguí así.
Podria faltar el mapa demostrando que el sur es «arriba» y el norte es «abajo» para simplificar que no hay una ubicación determinada de un objeto en el espacio, tal vez se deslice eurocentrismo y algo mas…un abrazo.
Pensé lo mismo, aunque ellos creen que es como el logo de la ONU, con el Polo Norte en el centro…. tienen mucha imaginación, son cospinaroicos y lo peor es que suman muchos adeptos a diario.
«Droja» dura esta sesión de Fronteras!!!
Al final, al pobre Mercator se le pone a caer de un guindo siempre, pero te permite no perder el rumbo
Y supongo que conocido por todos, sobre el mismo tema https://xkcd.com/977/
Está enlazado en el texto 🙂
Ahora que lo dices, sí, pero bien escondidito que está ;o)
Eso sí, no todo el mundo puede decir que pone en su blog más proyecciones que Randall Munroe.
Chapó Sr. Gon!!!
Muy interesante entrada. Cabría preguntarse para qué sirven tantas proyecciones. Todas intentan aproximar una esfera, cosa imposible. Pero, ¿para qué? Está claro que la proyección Mercator es la ideal para la navegación, pero claramente las cartas de navegación tienen una escala más pequeña, en la cual las formas y superficies se preservan aceptablemente. Pocas razones se me ocurren para utilizar un mapamundi, salvo aplicaciones satelitales y balísticas.
Parecería que el mapamundi tiene un sentido didáctico, más que nada. Y en ese caso yo me pregunto por qué no utilizar directamente un globo terráqueo o un Mercator normalito para los atlas (salvo tal vez para los continentes).
Buenísimo, como siempre.
Que divertido sería estudiar geografía con estos mapas tan curiosos! 😀
1Los ángulos, Las áreas y las distancias
2
3No, no me imaginaba
4la extraña: corazón Proyección Werner
No me gusto: Proyección Octante
5Seria confuso y no tan divertido
6Pesado pero interesante
Thiara