La Audiencia de Barcelona ha condenado a Dani Alves a cuatro años y medio de prisión, otros cinco de libertad vigilada y nueve años de orden de alejamiento de la víctima, a la que además deberá indemnizar con 150.000 euros, por la agresión sexual que cometió contra una joven de Barcelona el pasado diciembre de 2022. Pero de esos cuatro años y seis meses que recoge la sentencia, ¿cuánto tiempo pasará entre rejas el brasileño?

El exfutbolista cumplió un año en la cárcel el pasado mes de enero, pues ingresó en el Centro Penitenciario Brians 2 el 20 de enero de 2023 en régimen de prisión preventiva sin fianza, por lo que ahora deberá hacer frente a los tres años y cinco meses de prisión que aún le quedan por cumplir.

Así es la sentencia de Dani Alves, condenado a cuatro años y seis meses de cárcel por violación

Alves, sin embargo, podría recuperar su libertad antes de completar la pena solicitando permisos, primero, el tercer grado, después, y la libertad condicional, en última instancia. "Ese año se contabiliza en los cuatro años y medio y, con buena conducta y con todo, a partir de la mitad de la condena podría empezar a pedir permisos para salir", ha explicado el abogado de Derecho Penitenciario, Ramón Belo, del bufete Belo Silva Abogados, a 20Minutos.

"Hasta que no cumpla tres cuartas partes [de la condena] no puede solicitar la modificación del grado", continúa el letrado, que subraya el buen comportamiento o el trabajo en el interior de la prisión como acciones clave en la instancia que presenta un reo para pedir el tercer grado, así como una oferta de empleo en el exterior. 

Dado que "le faltan por cumplir tres años y medio, con que cumpla un año más, más o menos, va a poder empezar a pedirlo", señala Belo, que explica que "hay diferentes modalidades" de tercer grado que dependen de cada caso, y que van desde "el que va a trabajar fuera y luego duerme" en la cárcel, hasta "los que salen solo los fines de semana".

Respecto a la libertad condicional, el abogado insiste en que Alves primero tendría que haber estado sujeto al régimen de tercer grado: "La libertad condicional ya es un poco el final, cuando te queda muy poquito de condena, para no tener que volver a pernoctar, o puede ser también que llevara la típica pulsera en el tobillo para que no se vaya del país y esté controlado".