El estrés en el trabajo es una realidad habitual para muchas personas. Se trata de una respuesta ante situaciones que identificamos como peligrosas, o que requieren nuestra atención. Es una reacción normal de nuestro cuerpo y mente que no debemos demonizar, ya que puede servirnos para estimularnos o motivarnos a hacer determinadas tareas. No obstante, cuando el estrés es continuo en vez de puntual y nos dificulta el desarrollo de nuestra actividad diaria es momento de ponerle solución.
Aprender a afrontar estrés en el trabajo es necesario. Trabajamos con deadlines ajustados, tenemos que justificar nuestras decisiones, convencer al equipo o simplemente presentar un resultado a la altura de las expectativas depositadas en nosotros. Todos estos factores influyen en el ánimo con el que afrontamos nuestro día a día, y hay momentos en los que podemos llegar a colapsarnos por el volumen o importancia de tareas pendientes.
Desde Core Smart Working apostamos siempre por crear un entorno propicio para el bienestar, en el que cada uno de nuestros smart workers desarrolle su trabajo con tranquilidad y marque su propio ritmo. Es por eso que queremos compartir con vosotros técnicas para aprender a relajarse en el trabajo, por si tenéis un mal día y necesitáis tomaros un respiro.
Técnicas para relajarse en el trabajo
La respiración
Controlar tu respiración de forma consciente durante unos momentos es útil para calmarte y salir del bucle. Prueba con una respiración profunda: coge aire hasta que notes que tus pulmones están llenos y la parte de tu abdomen se ensancha. Aguanta unos segundos la respiración y después suéltalo. Repite el ejercicio unas cuantas veces y, mientras lo haces, concéntrate solo en eso, sin pensar en nada más. Tras uno o dos minutos notarás cómo tu cuerpo se destensa.
Pausas regulares
Si tienes un trabajo en el que debes pasar muchas horas sentado frente al ordenador, es normal que te agobies y necesites algo de movimiento. Realizar pausas regulares cada cierto tiempo, el simple hecho de levantarte y dar un paseo de cinco minutos, te despeja y te reactiva. ¡No es sano estar 8 horas seguidas sentado en una silla! Sal, deja que te dé un poco el aire y luego vuelve, te sentará bien.
Descansa los ojos
Acompañando a los ejercicios de respiración, aprovecha también para cerrar los ojos y que descansen durante un momento. Cierra los párpados y realiza movimientos con los ojos como si estuvieras dibujando el símbolo del infinito ∞. Puedes repetirlo varias veces a lo largo del día.
Objetos antiestrés
Si te preguntas cómo relajarse en el trabajo, tener a mano alguno de estos objetos antiestrés es de lo más útil. Algunos ejemplos serían los péndulos, estas bolas de metal que se golpean unas a otras y que hemos visto en muchas películas y series. El movimiento del péndulo, continuado y constante, tiene un efecto relajante en nosotros.
La pelota de goma es otro de los clásicos, siempre lista para estrujarla y presionarla en cualquier momento. O el Fidget Cube, un cubo en el que cada una de sus seis caras te da múltiples opciones para apretar y rodar botones, una alternativa al clásico de morder el bolígrafo o estar moviendo la pierna sin parar.
Música relajante
La música amansa a las fieras, o eso dicen, ¿no? Prueba si en tu caso es cierto. Coge tus auriculares y busca una playlist de música relajante para trabajar en cualquier plataforma. Normalmente se trata de música instrumental, suave, que te imbuye un poco en un estado de ensueño. Las propiedades relajadoras de la música están ahí, y sin que te des cuenta la canción adecuada te sacará una sonrisa.
No dejes que el estrés te impida crecer y desarrollar tu trabajo como tú querrías. Aprende a controlarlo y libérate de presiones para disfrutar de la mejor versión de ti mismo cuando te encuentras en el trabajo. Nosotros en Core Smart Working nos esforzamos en crear la mejor experiencia y el entorno propicio para que te sientas a gusto, ¡ven a vernos y lo comprobarás!