Montserrat Ibáñez, Isabel Andrés y Ramiro Ibáñez, regidores del los ayuntamientos de Quintanar, Regumiel y Canicosa, que desde hace siglos comparten la jurisdicción del Comunero de Revenga, se reunieron ayer en Burgos con el presidente de la Diputación, César Rico, para comentarle distintos asuntos sobre esta Comunidad de Villa y Tierra, entre ellos uno de los problemas a los que se están enfrentando durante los últimos meses, el secretario del comunero.
Tradicionalmente, esta función ha venido siendo desempeñada por el secretario del pueblo que capitula cada año, hasta el año pasado, cuando los secretarios de los tres ayuntamientos pidieron a la Junta un informe para saber si era necesario realizar un nombramiento para desempeñar esa función, como explica la alcaldesa de Quintanar, Montserrat Ibáñez. «La Junta determinó que había que crear una plaza y hemos estado trabajando para atajar esto de la manera mejor y más rápida».
De momento, el Comunero ya ha solicitado a la Junta de Castilla y León la creación de esta plaza y ha pedido un informe a la Diputación para que exima de que la misma sea a tiempo completo, ya que no existe volumen de trabajo para ello. «Ya está hecho el informe de creación de la plaza. Ahora estamos a la espera de que la Junta nos de una respuesta, que nos sugiera cuál es la mejor manera de solucionarlo».
Existen dos opciones, una de ellas es agrupándola a uno de los tres municipios, para que se pueda desarrollar libremente, y así el secretario de esa localidad no tenga que desplazarse a ningún sitio, sino que pueda gestionar la administración del Comunero desde su puesto en ese consistorio, y otra es por acumulación, es decir, que uno de los secretarios acumulase la plaza, pero esta es inviable, ya que los que podrían hacerlo, los de Regumiel y Quintanar, ya tienen acumulada otra plaza, mientras que en el caso de Canicosa es interino. La propuesta del Comunero, a expensas de la respuesta de la Junta, es que sea la secretaria de Regumiel de la Sierra la que ocupe esa plaza durante los tres próximos años, «así habría una mayor continuidad», explica Motserrat Ibáñez.
Desde hace un año el Comunero está sin secretario, por lo que durante los tres plenos que ha habido en estos últimos meses los ayuntamientos que lo componen han estado asistidos por personal del Servicio de Asesoramiento Jurídico y Urbanístico a Municipios y Arquitectura de la Diputación. «Nos encontramos en un impasse que esperamos solucionar lo antes posible», reconoció la alcaldesa de Quintanar.
Durante el encuentro, los alcaldes comentaron a Rico otros asuntos, como la reciente adjudicación del bar-restaurante del Comunero y le invitaron a la Fiesta de Revenga, que se celebrará el sábado 31 y es una de las romerías más antiguas, remontándose al menos al siglo XVI. La fiesta comienza con el saludo ritual de cruces y pendones de los pueblos participantes, tras el cual tiene lugar la misa y la procesión en la que se saca a pasear por la campa a la virgen, entre bailes y canciones. A lo largo de todo el día, feriantes y artesanos se instalan en la campa, sirviendo de entretenimiento al alto número de asistentes que en esa jornada se acercan a este territorio que gestionan Quintanar, Regumiel y Canicosa.