Cómo tapar pequeños agujeros en la pared: de la masilla al bicarbonato o la cera de las velas

Por distintas razones es muy común que aparezcan agujeros en la pared. Será muy importante ponerle solución cuanto antes, ya que se pueden convertir en grietas y esto sí que será un problema real. Igualmente, será esencial tapar los agujeros si vamos a quitar un cuadro o esa zona de la pared se va a quedar al descubierto. Para poder tapar estos agujeros no habrá que tener grandes conocimientos en bricolaje y podrás hacerlo tú misma en casa con distintas herramientas.

Lo primero que deberás hacer será acudir a un centro de bricolaje a comprar un poco de masilla, una espátula, una lija de grano fino y pintura. Así, debes introducir un poco de masilla en el agujero. Esta debe ser la cantidad suficiente para rellenarlo completamente y extenderlo bien con la espátula hasta que quede lo más lisa posible.

Después, será muy importante quitar el exceso de masilla con la espátula. Luego, cuando la masilla se haya secado, habrá que pasar la lija por la superficie para que quede todo nivelado. Por último, y para un resultado ideal, se deberá aplicar la pintura del mismo color para que no se note que hemos aplicado la masilla.

Si lo que quieres es lograr un resultado más profesional siempre podrás hacer un poco de escayola. Para ello, se tendrá que hacer una bola con papel absorbente, del tamaño del agujero, y cubrirla con escayola húmeda. Luego, deberás meter esa ‘pelotita’ en el hueco que quieres tapar. Lo siguiente será aplicar algo más de escayola o de pintura para que la superficie quede totalmente lisa y uniforme. 

Otra buena idea será hacer una mezcla con un poco de aspirina y pasta de dientes. Para ello, habrá que triturar una aspirina hasta que sea totalmente polvo y se combinará con un poco de dentífrico. Una vez que haya quedado una especie de ‘masilla’, lo ideal será tapar los orificios y observar que esto queda totalmente sellado. 

El bicarbonato de sodio también podrá tapar los orificios de las paredes. Para ello, deberás mezclarlo con pegamento blanco. Así, la mezcla proporcionará una consistencia más espesa que habrá que aplicar en el agujero, creando una especie de tapa. Cuando termines deberás pasar una espátula y pintar de forma uniforme. 

Un truco muy eficaz, aunque no tan infalible, será la cera de una vela. Así, deberás utilizar la vela la deshecha para crear una bola e introducirla en el orificio. Lo ideal será manejar lacera cuando aún está tibia para que se pueda moldear correctamente. Además, deberá cubrir correctamente todo el espacio del agujero. Eso sí, habrá que tener en cuenta que la vela deberá ser del mismo color de la pared. 

En el caso de que observes que el agujero ya se está convirtiendo en grieta habrá que tomar cartas en el asunto. En estas ocasiones, lo más recomendable será acudir a un profesional que pondrá solución a este problema que podrá ser realmente algo preocupante si se sigue extendiendo.