Actriz, directora y escritora, Emma Cohen (Barcelona, 1946) era una mujer culta, libre, talentosa y comprometida que prefirió el mundo de la cultura al del Derecho. Hija de abogados, la que fue musa del cine español abandonó la universidad y se zambulló en el teatro, el cine y los libros. La viuda de Fernando Fernán-Gómez, con quien escribió Las bicicletas son para el verano ("una lección de vida y no de historia"), murió el lunes en su casa de Algete (Madrid), un chalet enorme lleno de libros en mitad de una parcela en la que crecía hierbabuena, aromática planta que la pareja interpretó, en su día, como una señal para comprar la vivienda y ubicar aquí su guarida. Emmanuela Beltrán Rahola tenía 69 años y llevaba varios meses luchando contra un cáncer del que pocos sabían. Ha sido enterrada en la más absoluta intimidad.

Se cambió el apellido cuando su padre, enfadado después de que su hija abandonara Derecho, así se lo sugirió. El progenitor no quería que llevara el nombre de la familia. Emma, que se sentía como una marciana en el mundo burgués en el que había nacido, se lo cambió tres veces y, al final, optó por el de un antepasado suyo que fue expulsado de España.

España se le quedó pequeña y viajó a París para vivir el Mayo del 68, donde fue detenida por la policía. Su madre fue a buscarla. "Si no vuelves me muero", la amenazó. Y Emma volvió. Pero cambió su ciudad natal por Madrid.

Cohen, que se pateó los teatros de la mano de Adolfo Marsillach y Mario Gas, entre otros, era una "preciosidad rebosante de talento" que ejerció de "ángel salvador" en varios rodajes muy duros. Así la definió Alfredo Landa en Vida de un cómico, las memorias en las que el fallecido actor admiraba la paciencia que su compañera tenía con Fernando Fernán-

Gómez, un hombre "encantador e inteligente que al tercer whisky se volvía hosco, agresivo y despótico, con unos ataques de cólera imprevisibles".

37 años con Fernán-Gómez

Cohen y Fernán-Gómez se conocieron en 1970, en el rodaje de Pierna creciente, falda menguante, y se convirtieron en "amigos, compañeros, camaradas y de todo". La actriz nunca ha ocultado que, una década más tarde, la pareja se tomó un año sabático para hacer lo que cada uno quisiera. Fue ahí cuando la protagonista de Las petroleras mantuvo una estrecha relación con Juan Benet.

Fernán-Gómez, que contó con su pareja para filmes como Bruja más que bruja y El viaje a ninguna parte, y Cohen se casaron en el 2000, después de que el actor y director fuera ingresado de urgencia. Murió siete años después y hasta el final estuvo cuidado por la que muchos recordarán como la entrañable gallina Caponata de Barrio Sésamo.

Convencida de que España debería pedir perdón para dejar claro que el golpe de Estado del 36 fue una "ilegalidad contra todos los ciudadanos de este país", siguió de cerca el movimiento 15-M, que creía más serio de lo que muchos intentaban vender. Incluso se acercó a la Puerta del Sol para llevar comida y libros.