Tapizando cada rincón de su habitación con muñecos de acción, un joven de Ciudad Madero ha logrado hacerse de la colección más grande de estas figuras en esta región y de la que también ha hecho una vida a la cual dedicarse.
Rafael González, oriundo del municipio petrolero, tiene en su haber una de las colecciones más grandes de muñecos coleccionables, algunos son provenientes de los lugares más lejanos del mundo y nos permitió conocerla.
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¿Cómo empezó su gusto por los muñecos de acción?
A sus 19 años, Rafael quedó encantado por las películas de superhéroes, fueran estas mismas repletas de acción, efectos especiales y sorprendentes personajes las que activaron la chispa en el el para comenzar a dedicarse a la colección de muñecos.
“Ahí me empezaron a gustar los superhéroes, empecé a comprar en los rodantes y luego a pedir de Matamoros, Reynosa, Chiapas y varias partes de la republica”, mencionó.
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Inclusive ha realizado viajes a la Ciudad de México donde ha comprado hasta 10 pesos en muñecos, y ha sido tanta la cantidad de muñecos que él mismo no recuerda cual fue el primero que compró, pero sí asegura que cuenta con arriba de dos mil figuras actualmente, pero que las rota constantemente.
Figuras de acción de superhéroes, videojuegos y anime
La variedad de su colección la conforman diversos intereses del mundo friki, con varias repisas dedicadas a Hulk, otra de Mario Bros, otro de los Caballeros del Zodiaco y la lista podría seguir, Rafael no se limita a reunir solo un personaje.
“Mi caricatura favorita es Dragon Ball, de Marvel Hulk es mi favorito y Mario por el videojuego, mi primer consola fue el Nintendo 64 y mi primer cartucho el Mario 64”, describió diciendo que es de ahí donde han salido las ganas por coleccionar cada uno de los personajes que conforman su santuario.
Y esta gigantesca colección no solo es en cantidad sino en tamaño, ya que ha logrado hacerse de personajes que cabrían en la palma de tu mano, como algunos que podrían ser del tamaño de un niño pequeño.
Coleccionar muñecos de acción requiere una gran inversión
Aunque parezcan de un tamaño pequeño, te aseguramos que su precio no lo es, pues el joven coleccionista estima que ha invertido alrededor de 150 mil pesos en toda su colección, pero de la cual ha también logrado generar provecho.
“Algunas de las piezas pueden costar entre 300 hasta 700 pesos y mucho depende de cuando hay escasez, cuando más escasea una figura más aumenta su precio”, complementó.
Pero esto no ha sido una derroche o un gasto, Rafael ha convertido su pasión en un emprendimiento, ya que actualmente se dedica a la venta de estos mismos muñecos, ya que algunos los adquiere y pasado cierto tiempo los cambia.
“Hace poco vendí un paquete de dragones y varias figuras, el paquete entero en cinco mil pesos. Me dedico a esto, a vender en el rodante o en páginas de Facebook y Mercado Libre”, detalló el entrevistado.
Para concluir, invitó a todos aquellos que estén interesados en iniciar una colección que no lo vean como algo de lo que se puede hacer dinero fácil, es un tipo de comercio que requiere de mucho aprendizaje y paciencia.
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Rafael ha traducido su pasión por el mundo friki en una forma de vida, que forma tanta parte de ella que tiene tapizada su habitación con esta colección de muñecos de acción, y que sí, tiene guardados hasta en el ropero y seguramente seguirá creciendo mientras tenga espacio en su casa, en Ciudad Madero.
