Algunos amigos joviales indujeron a Santiago Calzadilla en 1891 a que publicara sus “memorias” sobre los tipos y costumbres de la sociedad que frecuentó en su juventud. Fragmentos sueltos parecieron originariamente en el diario porteño La Nación, con el auspicio de Argos, quien no era otro que Bartolomé Mitre y Vedia. Reunidos constituyeron el libro “Las beldades de mi tiempo”, risueñamente célebre en la época de su aparición.
Me resulto muy interesante, tanto que me lo termine en 3 días, esto es todo un record teniendo en cuenta que el libro es casi autobiográfico ó mas bien de memorias y no soy para nada adepta a este tipo de lectura, pero si me gusta la historia y cuando cuentan especificamente acerca de hechos de la gente común y lugares del pasado. En este caso me atrapó el hecho que narrara cosas cotidianas de una época de Argentina (1820-1880) muy poco conocida por mi y me atrevo a decir por la mayoria de los Argentinos. Algunas cosas continuan pasando aún 2 siglos despues (deuda externa, corrupción, politicos innombrables, etc.). En algunos momentos de la lectura hasta pude imaginarme las calles y los lugares de Buenos Aires, como vivian y quienes eran la clase arístocrática de aquel momento (muchos apellidos continuan aún hoy dia en lugares privilegiados), como fue la creación del cementerio de la recoleta, el primer tranvia, los viajes que duraban meses etc, etc.. Como narrador Calzadilla deja mucho que desear, está permanentemente llendose por las ramas y deja de lado el tema que empezo y por otro lado muchas veces va hacia atras y adelante en el tiempo sin especificar el año aprox. , lo que tal vez para sus lectores contemporaneos les era facil ubicarse, pero 2 siglos despues yo me perdia como la mejor. En resumen me gusto muchisimo y debo agradecer al Reto Décadas Argentinas de Bookcrossing que hizo posible que me encontrara con este libro que yo por mi cuenta no lo hubiera leido.