Los tlaxcaltecas no traicionaron a los mexicas durante la conquista, eran aliados de los españoles
La alianza hispano-tlaxcalteca fue crucial para la derrota de los mexicas, pero habrá que aclarar que nunca hubo una traición, como muchos creen.
A 500 años de distancia aún hay quienes creen que los españoles por sí solos derrotaron a los mexicas, cuando esto lo lograron gracias a su alianza con los tlaxcaltecas, cambiando así, para siempre, el curso de la vida en esta parte del planeta.
Y aquellos mexicanos que sí lo saben, se dividen, sobre todo, en dos grupos: los que dicen que los tlaxcaltecas fueron unos traidores y quienes consideran que no hubo traición alguna, porque no se puede traicionar a alguien que no es aliado, y los tlaxcaltecas y mexicas eran antagónicos.
Alianza entre es pañoles y tlaxcaltecas empezó en 1519
La historia empezó cuando Hernán Cortés llegó en 1519 con sus tropas a tierras tlaxcaltecas. Sin embargo, a partir de ahí, los datos empiezan a ser difusos toda vez que las referencias se bifurcan: una versión señala que los tlaxcaltecas repelieron a los peninsulares, mientras que una segunda expresa que los recibieron amistosamente desde el inicio.
En un segundo periodo, tras el contacto entre ambas culturas, empezaron las cortesías, los ritos de entrega de regalos, negociaciones, también se les dieron a las hijas de los señores tlaxcaltecas, uniones que más tarde servirían para reforzar las alianzas entre ambas culturas.
Totonacos, primeros en aliarse con españoles
Se sabe que quienes recomendaron a los hispanos solicitar la ayuda de los tlaxcaltecas fueron los totonacos de Cempoala. De hecho Cortés envió a un grupo de totonacos a hablar primero con los tlaxcaltecas, para saber si serían recibidos con cortesía u hostilidad, resultó ser lo segundo, a decir de algunas fuentes.
Aquí vale la pena aclarar un par de puntos para quitar la actual idea de traición por parte de los tlaxcaltecas; como quedó claro éstos no eran aliados de los mexicas, en segundo lugar no existía un país llamado “México”, es decir no había una unidad, ni tampoco existía una nación indígena como tal.
«Tácticamente los tlaxcaltecas vieron que les convenía mejor aliarse con ellos», explica el historiador José Juan Juárez, de la Universidad de Tlaxcala.
Batalla de Otumbra y luego la conquista de Tenochtitlán
Fueron varias las pugnas que la alianza hispano-tlaxcalteca libró contra las fuerzas mexicas, siendo una de las más memorables la llamada batalla de Otumba, en 1520, la cual fue una victoria para los peninsulares. Con este triunfo Cortés logró reorganizarse y sumar más hombres de pueblos indígenas sojuzgados por los ocupantes de Tenochtitlan. Un año después se concretaría la Conquista.
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