10 motivos para celebrar la filosofía: Sapere Aude

Mañana, 16 de noviembre, como todos los años el tercer jueves de noviembre, se conmemora el Día Mundial de la Filosofía. Esta fecha fue establecida por la UNESCO en 2002 para celebrar el valor de la filosofía como una disciplina que estimula el pensamiento crítico, el diálogo y la reflexión sobre los grandes problemas de la humanidad. Pero, ¿por qué la filosofía es tan importante? ¿Qué puede aportarnos, tanto por sí misma, como complemento a cualquier otra disciplina que estudiemos, así como a la vida cotidiana? A continuación, te presento 10 razones por las que la filosofía es la disciplina que más puede enriquecernos como personas.

1. La filosofía nos ayuda a conocernos a nosotros mismos. Desde la famosa máxima socrática “conócete a ti mismo” hasta las actuales corrientes de filosofía práctica, la filosofía nos invita a examinar nuestras creencias, valores, emociones, motivaciones y acciones, y a cuestionar si son coherentes, racionales y éticas. La filosofía nos permite desarrollar una identidad propia y una autoestima saludable.

2. La filosofía nos enseña a pensar por nosotros mismos. La filosofía no es una doctrina que nos dice qué pensar, sino un método que nos muestra cómo pensar. La filosofía nos proporciona las herramientas lógicas y argumentativas para analizar, evaluar y criticar las afirmaciones que nos encontramos en la ciencia, la política, la religión, la cultura o la vida cotidiana. La filosofía nos hace más autónomos, creativos y originales en nuestro pensamiento.

3. La filosofía nos forma como ciudadanos responsables. La filosofía nos hace conscientes de los problemas sociales, políticos, económicos y ecológicos que afectan a nuestra sociedad y a nuestro planeta. La filosofía nos anima a participar activamente en el debate público, a defender nuestros derechos y deberes, y a buscar soluciones justas y pacíficas a los conflictos. La filosofía nos hace más solidarios, tolerantes y democráticos en nuestra convivencia.

4. La filosofía nos abre a la diversidad cultural. La filosofía no es una disciplina exclusiva de Occidente, sino que tiene una larga y rica tradición en otras culturas, como la oriental, la africana o la indígena. La filosofía nos permite conocer y apreciar las diferentes formas de entender el mundo, la vida y el ser humano que han surgido a lo largo de la historia y en distintos lugares del globo. La filosofía nos hace más curiosos, respetuosos y dialogantes con otras perspectivas.

5. La filosofía nos conecta con la sabiduría universal. La filosofía no es una disciplina aislada, sino que se relaciona e integra con otras ramas del saber, como la ciencia, el arte, la literatura, la historia o la religión. La filosofía nos permite acceder al conocimiento acumulado por la humanidad a lo largo de los siglos, y a las grandes obras y autores que han marcado el desarrollo del pensamiento humano. La filosofía nos hace más cultos, eruditos y críticos con nuestro entorno.

6. La filosofía nos estimula a buscar el sentido de la vida. La filosofía nos plantea las grandes preguntas existenciales que todos nos hacemos en algún momento: ¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos? ¿A dónde vamos? ¿Qué es la felicidad? ¿Qué es la muerte? ¿Qué es el bien y el mal? La filosofía nos invita a reflexionar sobre estas cuestiones y a encontrar nuestras propias respuestas, sin imponernos dogmas ni verdades absolutas. La filosofía nos hace más libres, conscientes y trascendentes en nuestra vida.

7. La filosofía nos inspira a ser mejores personas. La filosofía no solo se ocupa de la teoría, sino también de la práctica. La filosofía nos propone modelos de virtud, de excelencia, de perfección humana, que podemos seguir para mejorar nuestra conducta y nuestra relación con los demás. La filosofía nos orienta hacia el bien común, la justicia, la dignidad y el respeto por todos los seres vivos.

8. La filosofía nos desafía a superar nuestros límites. La filosofía no se conforma con lo evidente, lo superficial, lo convencional. La filosofía nos empuja a ir más allá, a profundizar, a explorar, a innovar. La filosofía nos hace cuestionar nuestras certezas, nuestras prejuicios, nuestras rutinas, y nos abre a nuevas posibilidades, nuevas experiencias, nuevos horizontes. La filosofía nos hace más valientes, aventureros y visionarios en nuestro aprendizaje.

9. La filosofía nos ofrece placer intelectual. La filosofía no es una disciplina aburrida, difícil o inútil. La filosofía es una actividad apasionante, divertida y gratificante. La filosofía nos permite disfrutar del ejercicio de la razón, de la belleza de las ideas, del humor de los argumentos, de la elegancia de las expresiones. La filosofía nos hace más lúdicos, estéticos y sensibles en nuestro disfrute.

10. La filosofía nos prepara para el futuro. La filosofía no es una disciplina del pasado, sino del presente y del futuro. La filosofía nos ayuda a anticipar y afrontar los cambios y los desafíos que nos esperan en un mundo cada vez más complejo, incierto y globalizado. La filosofía nos dota de las competencias y las actitudes necesarias para adaptarnos, innovar y colaborar en la construcción de un mundo mejor. La filosofía nos hace más competitivos, flexibles y proactivos en nuestro desarrollo.

Espero que estas 10 razones te hayan convencido de la importancia y el valor de la filosofía. Si quieres saber más sobre esta fascinante disciplina, te invito a que te acerques a la biblioteca, al aula de filosofía o al club de debate de tu centro educativo, o que busques en internet recursos y actividades relacionados con la filosofía. Te aseguro que no te arrepentirás.

¡Feliz Día Mundial de la Filosofía!