Todo comenzó con un anuncio de McDonald's. En 1985, Inés Sastre era la protagonista de un comercial de la cadena de comida rápida que acababa prácticamente de desembarcar en España. Ese fue el arranque de la carrera de la, probablemente, modelo española más internacional. Que, sin embargo, y al revés que gran parte de sus colegas, fue actriz antes que maniquí. Tres años más tarde estrenó El Dorado, el Fitzcarraldo de Carlos Saura cuyo rodaje le llevó a pasar cuatro meses de duro rodaje en Costa Rica. "Aunque yo lo pasé bien porque Carlos siempre ha trabajado muy bien con niños", nos cuenta la vallisoletana en el número de diciembre de Vanity Fair.
Un año después del estreno de El Dorado Inés Sastre ganó el concurso de modelos Look of the Year que por aquel entonces organizaba la agencia Elite del magnate John Casablancas. Con el tiempo, se convertiría en la primera española en desfilar para la maison Chanel.
Por aquel entonces su carrera como maniquí, en la que ha protagonizado decenas de portadas, corría a la par que la de actriz, en la que acumula 15 títulos a las órdenes de cineastas como Saura, Michelangelo Antonioni, Wim Wenders o Pupi Avati. Todo, mientras se licenciaba en Filología en la Universidad Sorbona de París por empeño personal. "Pasaba por delante y me lo pedía el cuerpo, me decía: tienes que estudiar ahí". De hecho, la modelo acabó instalándose en la capital francesa, donde ha vivido durante los últimos 30 años plenamente integrada en la vida social y cultural. Hasta le han condecorado con la Medalla de las Artes y las Letras –en 2011, y por el ministro de Cultura de la época Frédéric Mitterrand–.
Sin embargo, Inés escogió Londres para contraer matrimonio con el financiero italoamericano Alex Corrias en abril de 2006 en Londres, enfundada en un vestido precioso diseño de su amiga Alberta Ferretti. Entre los 80 invitados Marella Rossi, hija mayor del anticuario francés Jean-Marie Rossi y compañera de clase de Inés en la Sorbona; Blanca Suelves y su marido, Ioannes Osorio, duques de Alburquerque, o Elena Cué. Apenas un año después se separaron, pero mantienen una relación bastante cordial. Por cierto: con motivo del enlace los tabloides británicos hablaron de los "11 Mr. Equivocados' que, al parecer, habían precedido a Corrías: “El playboy Tim Jeffries, el aristócrata escocés Simon Lovat, el abogado italiano Massimiliano Bianchi, el gurú de las relaciones públicas Simon Astaire, el actor americano Billy Zane, el hombre de negocios belga Michel de Maleingreau d’Hembise y el golfista Colin Montgomery”. En su día también se le atribuyó un romance con Luis Alfonso de Borbón, que hoy niega, y con el rey Felipe. "Entonces yo era una enana y me lo tomé como un rumor más", nos dice.
El amor de su vida es sin duda su hijo Diego, de 14 años y el principal motivo del regreso de Inés Sastre a España después de tres décadas en Francia. Madre e hijo han cambiado las vistas a la Torre Eiffel, cuyo foco alumbraba el dormitorio de Inés, por las del Colegio Jesús y María del Barrio de Salamanca, el más exclusivo de la capital. La modelo y actriz también tiene una casa de verano en Sotogrande donde acude puntualmente cada mes de agosto en compañía de Diego. Allí practica su deporte favorito, el golf, y se deja ver en la playa o con amigos. Sastre se muestra encantada con sus visitas estivales a la urbanización más exclusiva de España, estancias que le han permitido además mantener el vínculo con España. A ella y a su hijo, Diego. O "Inesito", como le llama ella en broma debido a su gran parecido físico.
